La Guerra de los Mundos
Spielberg y Tom Cruise se unen nuevamente tras la más que notable Minority Report, para llevar de nuevo a la gran pantalla la obra de HG Wells. Esta recreación nos muestra, con la aportación los efectos digitales (colosalmente conseguidos), los intentos de conquista de una raza extraterrestre hostil y muy superior tecnológicamente a la raza humana. Tom Cruise, el protagonista, un padre divorciado al que le toca cuidar de sus hijos ese fin de semana, tiene que enfrentarse a dos problemas apocalíptcos; la mentada invasión y el poco cariño que por él muestran sus hijos. Ciertamente no soy un fan de este señor, pero da la talla en todo momento al igual que casi todo el reparto, y digo casi todo porque durante una media hora tenemos que soportar la aparición de Tim Robins, en la que puede ser una de sus apariciones mas prescindibles.
Spielberg se muestra capaz de contar la historia de manera coherente y sin caer en los tópicos y la banalidad patriótica de otras exponentes del genero (como la inefable Independence Day) y sólo patina en su desenlace, tal y como viene siendo habitual, forzando una situación políticamente correcta (la aparición con vida del hijo mayor). Aunque claro, esto es cierto si no consideramos patinar a la sosería y el tedio que rezuma la película desde su nudo hasta su conclusión y que la convierten en un producto totalmente prescindible, que si bien se nota hecho con esmero, naufraga estrepitosamente en su misión de entretener y divertir.
A menos que lo que te quede por ver en el cine sea terriblemente malo y no tengas nada mejor que hacer (como observar el crecimiento de los mohos de tu nevera) no la veas.
Actualización: Despues de meditar la película creo que he sido injusto obviando una cosa; la actuación de la jovencísima Dakota Fanning es realmete sobresaliente. Todo lo que hace y dice es creible, llenando la pantalla y haciendonos sentir cariño y compasión. El resto, lo dicho.